Fluye

Por Bruno Rico Gómez.

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El agua representa paz y esperanza para muchos pueblos en África, para ciudades enormes representa progreso y poder. Así como se ve el agua en muchas partes del mundo, se ven sus hermanos, o bueno, hermanos según su clasificación de fluidos.

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Es increíble, que, a pesar de que nos rodean estos fluidos todo el mundo los ignora sin conocer el verdadero potencial que hay detrás de ellos. Hablo de poder hacer volar un avión, de llevar agua lugares remotos, hacer flotar un barco y la última tendencia, crear energía limpia.

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Uno de los primeros grandes trabajos con fluidos fue el transportar agua de las montañas y ríos hasta las ciudades, el Imperio Romano crea lo que fue una de sus obras más importantes, el acueducto. Construcciones de ladrillos con series de arcos que median miles y miles de kilómetros que podían dar agua a toda una ciudad. Este tipo de edificaciones fueron primordiales para que al Imperio Romano se le conozca como uno de los más grandes de la historia humana.

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Entrando a historia reciente, al siglo XIX, los hermanos Wright inventan el aeroplano y con ello crearan una de las ramas de la mecánica de fluidos, la aerodinámica. Desde ese glorioso primer vuelo del avión de los hermanos Wright muchos científicos e ingenieros han dedicado sus vidas al estudio de la aerodinámica de los aviones. Una de las palabras empeñadas en esta rama y que es mundialmente conocida es Turbulencia, que según su definición es el movimiento aleatorio de las partículas del fluido, que en vez de viajar en maneras paralelas viaja en forma de torbellinos. Así es, las turbulencias que sufren los aviones han sido descritas desde hace años pero hasta hoy no hay una manera exacta de calcular dichas turbulencias.

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Esta rama no solo aplica para los aviones y avionetas, sino que, hasta en los vehículos de alta velocidad. Científicos diseñaron los famosos túneles de viento, ventiladores enormes con los cuales es posible ver la trayectoria de las turbulencias en ciertas partes de los aviones. ¿Pero y si metían diferentes objetos en los túneles? Al fin del día eso es ser científico, quitarte la duda, y vaya sorpresa se llevaron al meter un automóvil de esa época (hablamos de los 60´s y 70´s) pues estos vehículos no eran aerodinámicamente apropiados y por tal razón consumían mucho combustible, pues a mayor resistencia del aire mayor debe ser el esfuerzo motriz para que se impulse el carro. Gracias a esto hoy existe el record de velocidad para un automóvil que le pertenece al ThrustSSC, un coche propulsado por turbohélice doble que alcanzó los 1227,985 km/h en una milla en octubre de 1997.

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​Los fluidos están alrededor de nosotros y mencionar cada uno de sus casos me haría escribir un libro completo, pero sin duda los ingenieros y científicos se han encargado de darnos la comodidad y tranquilidad de no tratar con estos temas complejos de manera directa.